La 'yenca' de ediles descarrilados

Como todos los meses, al recibir la revista 'Al Revés' en el buzón de casa, he visto una carta publicada firmada por el señor Ruiz Garrido, edil socialista de la localidad.


En ella, justifica el voto favorable tanto a los Presupuestos para 2012 presentados por UPN al igual que la nueva Plantilla Orgánica. Su voto es libre pero dándolo positivamente y entregando un cheque en blanco al equipo de gobierno (UPN) y en contra de lo que en campaña fueron los miembros del PSN promulgando.
Además acusa al grupo de NaBai de llamarlo borrego. Sr. Ruiz-Garrido, a usted no se le llamó borrego, sino a su actuación de 'borreguismo'. Según la RAE, 'borreguismo' es "actitud de quien sin criterio propio, se deja llevar por las opiniones ajenas". Su actuación de seguidismo político continuo hacia UPN se conoce más que de sobra. Ya en la legislatura 2003-2007, en la que usted fue también edil socialista junto con Lourdes Montero y Enrique López también actuaba de la misma manera. Así que por favor, no diga palabras que no son ciertas. Diferencie entre ser borrego y actuar como tal.


Respecto a las enmiendas, dice "que no había por donde cogerlas, no sabían ni como presentarlas". Como veo que aún estando presente en el pleno no se enteró se lo explicaré: por motivos técnicos (desde intervención, nos lo recomendaron por maniobra económica) tuvimos que retirar algunas de las enmiendas de inversión, y el resto se rechazaron con el voto de UPN, PP, CDN y el suyo mismo (PSN).
Usted, en cambio, optó por la vía fácil y no presentó ninguna enmienda, saltándose una vez más el programa con el que se presentó hace 6 meses a los comicios municipales.


Respecto al receso, lo tuvimos que pedir para llevar una propuesta firme y enmendar la Plantilla Orgánica que finalmente se aprobó, ya que no se ajusta a la realidad de Zizur. Esto paralizó el pleno tan sólo 4 minutos. Le recuerdo que cualquier grupo tiene derecho a pedir recesos y que se les acepte; veo que lo desconocía.


Sr. Ruiz, la verdad no sé si es que no se ha querido enterar de la realidad o es que no quiere. Al final su actuación es como "consejos doy que para mí no tengo", en el mundo de incompetencia que usted describe, que desde luego, nosotros no formamos parte.