1 mar 2012

Andalucía y Asturias, ¡de nuevo a las urnas!

El próximo domingo 25 de marzo, Andalucía y Asturias vuelven a las urnas. A Andalucía le toca renovar su Parlamento al agotarse la legislatura, pero Asturias porque así lo ha decidido su presidente, Francisco Álvarez Cascos que hace nueve meses tomó posesión del cargo tras ganar las elecciones.


En Andalucía se espera un vuelco espectacular. Y digo espectacular, porque desde 1982, primeras elecciones del Parlamento andaluz, el PSOE ha ganado todas las elecciones y nada menos que por mayoría absoluta. Pero el poder desgasta, y tras 30 años consecutivos gobernando, parece que puede llegar un cambio al palacio de San Telmo.
Y lo que es más que una evidencia, que el desgaste sumado a la gran derrota socialista el pasado noviembre (en Andalucía también pasará factura), llevará al Partido Popular a la primera posición en los resultados electorales. ¿Con mayoría absoluta o simple? Todavía es algo incierto, aunque hay encuestas de todo tipo y de todos los gustos.
Para el que PSOE vuelva a gobernar, el PP no deberá sacar mayoría absoluta, pero la suma entre socialistas, IU y Partido Andalucista (necesitaría el apoyo de UPyD si entra en el Parlamento) deberá de dar 55 escaños, como mínimo. Es posible que entre las cuatro formaciones consigan sobrepasar ese número pero el apoyarse para gobernar... asunto más difícil.


Mi 'porra' de resultados en Andalucía es la siguiente:
PP 54-57, PSOE 41-45, IU 7-10, PA 1-2, UPyD 1-2. (Actual: PSOE 56, PP 47, IU 6, PA 0).


Y ahora nos vamos del sur al norte, hasta Asturias. 
El presidente Álvarez-Cascos, harto de las 'zancadillas' que le ponen PSOE y PP, convocó elecciones anticipadas tras el rechazo de éstos a los Presupuestos Generales del Principado para 2012.
Cascos, exministro del PP y fundador de su nueva formación política "Foro Asturias" (FAC) se alzó con la presidencia de esta comunidad al conseguir 16 escaños frente a los 15 del PSOE y los 10 del PP, pero no fue primera fuerza por número de votos, ya que los socialistas sumaron algo más de mil votos que la formación regionalista.
Suponemos que Álvarez-Cascos habrá 'hecho' bien los cálculos para volver a ganar las elecciones, puesto que ha sido muy arriesgada su apuesta, en un momento en el que el Partido Socialista está en plena renovación tras su descalabro electoral y la fuerza de los conservadores del PP.


Próxima entrada, hablaremos de Euskadi y Galicia, que en un año exacto (si no hay adelanto electoral) sus ciudadanos renovarán los respectivos parlamentos.

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